Entrenamiento Funcional Terapéutico
¿En qué consiste el entrenamiento funcional terapéutico?
El entrenamiento funcional terapéutico es un enfoque de ejercicio que se centra en mejorar la capacidad funcional del individuo, es decir, su capacidad para realizar actividades cotidianas de manera eficiente y segura.
Este tipo de entrenamiento se basa en movimientos que imitan las actividades diarias y deportivas, utilizando ejercicios que involucran múltiples grupos musculares y movimientos en diferentes planos.
Características del Entrenamiento Funcional Terapéutico
- Personalización. Los programas se adaptan a las necesidades y capacidades individuales, teniendo en cuenta las limitaciones físicas y objetivos personales.
- Movimientos integrados. Se enfoca en movimientos compuestos y multiarticulares, como la sentadilla y los ejercicios de empuje.
- Mejora de la estabilidad y el equilibrio. Los ejercicios están diseñados para mejorar la estabilidad, el equilibrio y la coordinación.
- Uso de equipos variados. Puede incluir el uso de bandas elásticas, pelotas de estabilidad, mancuernas, barras, discos, kettlebells y otros equipos que permitan movimientos naturales y libres.
- Rehabilitación y prevención de lesiones. Este tipo de trabajo lo utilizamos comúnmente en la rehabilitación de lesiones y la prevención de futuras lesiones, mejorando la funcionalidad y reduciendo el dolor.
- Enfoque global del cuerpo. En lugar de trabajar músculos aislados, se trabaja el cuerpo como un todo, promoviendo una musculatura equilibrada y funcional.
Mejora tu calidad de vida con nuestro entrenamiento funcional terapéutico, diseñado por fisioterapeutas expertos para ayudarte a alcanzar tu máximo potencial.
¿Cuáles son los beneficios del entrenamiento funcional terapéutico?
Beneficios físicos
- Aumento de la resistencia cardiovascular. Muchos ejercicios funcionales se realizan en intervalos de alta intensidad, lo que mejora la resistencia cardiovascular y la salud del corazón.
- Mejora del metabolismo. El trabajo con múltiples grupos musculares y movimientos compuestos aumenta el gasto calórico, ayudando a mantener o reducir el peso corporal.
- Mejora de la fuerza general. Aumenta la fuerza de los músculos utilizados en las actividades diarias. Esto lo verás mes a mes.
- Mejora de la flexibilidad y movilidad. Este tipo de trabajo mejora la movilidad, lo que es crucial para mantener la flexibilidad y la independencia a medida que se envejece.
- Mejora de la coordinación y la propiocepción. Al trabajar movimientos complejos y en diferentes planos, se mejora la capacidad del cuerpo para percibir su posición en el espacio, lo que reduce el riesgo de caídas y lesiones.
- Recuperación más rápida de lesiones. Al enfocarse en movimientos funcionales, el entrenamiento ayuda a recuperar la movilidad y la fuerza después de una lesión, acelerando el proceso de rehabilitación.
Beneficios mentales y emocionales
- Reducción del estrés. La actividad física regular libera endorfinas, que son hormonas que ayudan a reducir el estrés y mejorar el estado de ánimo.
- Mejora de la salud mental. El ejercicio regular puede ayudar a reducir los síntomas de la depresión y la ansiedad, promoviendo una sensación general de bienestar.
- Aumento de la confianza y la autoestima. Mejorar la capacidad funcional y la apariencia física puede aumentar la confianza y la autoestima.
- Mejora de la función cognitiva. El ejercicio físico regular ha demostrado tener beneficios en la mejora de la memoria y la función cognitiva, lo que es crucial para la salud mental a largo plazo.
Beneficios sociales
- Interacción social. Participar en clases de entrenamiento funcional o grupos de rehabilitación puede ofrecer oportunidades para socializar y formar nuevas amistades.
- Apoyo comunitario. El apoyo de compañeros y fisioterapeutas puede ser una fuente de motivación y responsabilidad, ayudando a mantener la constancia en el ejercicio.
Beneficios para la calidad de vida
- Independencia. Al mejorar la funcionalidad y la movilidad, las personas pueden mantener su independencia durante más tiempo, realizando actividades diarias sin ayuda.
- Mejora del sueño. La actividad física regular puede ayudar a regular los patrones de sueño, mejorando la calidad y la duración del mismo.
- Reducción del riesgo de enfermedades crónicas. El ejercicio regular ayuda a controlar y prevenir enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares.
- Mantenimiento de la salud ósea. Los ejercicios de resistencia y peso corporal fortalecen los huesos, lo que es especialmente importante para prevenir la osteoporosis y otras enfermedades óseas del envejecimiento.
¿A quién va dirigido el entrenamiento funcional terapéutico?
- Adultos mayores. Podrás mejorar la capacidad funcional y reducir el riesgo de caídas, manteniendo la independencia.
- Personas con lesiones. Es una buena forma de rehabilitarte tras una lesión y prevenir futuras recaídas.
- Atletas. Mejorarás el rendimiento deportivo mediante la mejora de la fuerza, la movilidad, la estabilidad y la coordinación.
- Personas con dolor crónico. Reducirás el dolor y mejorarás la calidad de vida mediante ejercicios específicos y controlados.
- Individuos con estilos de vida sedentario. Podrás iniciar una rutina de ejercicios de manera segura y efectiva para mejorar tu salud general.